Un 9 de abril de 1918, hace exactamente cien años, nacía en la ciudad de 25 de Mayo, Provincia de Buenos Aires, quien luego fuera el conocido médico dolorense, Dr. Francisco Stea.

“Pancho”, como familiarmente lo llamaban sus allegados y sus pacientes, era hijo de Don Antonio Stea y de Doña Antonia Canova, inmigrantes italianos nativos del pueblo de Gioia, Provincia de Bari, República Italiana; que decidieron radicarse en Argentina, más precisamente en la ciudad bonaerense de 25 de Mayo.

El Dr. Francisco Stea, junto con sus padres y sus 3 hermanos deciden mudarse a la Ciudad de Buenos Aires, viviendo en los clásicos conventillos de la zona sur de la ciudad capital.

En aquellos años de pobreza y hacinamiento extremos, dos de sus hermanos – que eran mellizos – fallecen incinerados en el pozo donde antiguamente se quemaba la basura de los conventillos, decidiendo la familia, a partir de esto mudarse a otra zona de la capital.

Luego de finalizar sus estudios primarios y secundarios, el Dr. Stea ingresa a la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, recibiéndose como médico en el año 1943, donde también incursionó en lo que luego sería también otra de sus vocaciones, la militancia política.

Realizando la residencia en el Hospital Rivadavia de la ciudad de Buenos Aires, conoce al médico dolorense Dr. Juan Ignacio Rípodas – que por esas casualidades de la vida, se convertiría luego en su cuñado- y éste le recomienda que una vez finalizada la residencia se traslade a General Guido porque en dicho pueblo no contaban con un médico. La idea de trasladarse al interior bonaerense lo entusiasma a “Pancho”, tal vez por su recuerdos de la infancia de su vida en 25 de Mayo, y decide mudarse a Guido para continuar ejerciendo su profesión.

Una vez afincado en el vecino pueblo, Francisco Stea conoce a quien fuera su primera esposa, Nélida Julieta Rípodas y tienen cuatro hijos: Ana María, Jorge Francisco, Horacio Antonio Hipólito y María Julieta Libertad.

Paralelamente a su vida de profesional en la medicina, comienza su militancia política dentro de la Unión Cívica Radical que lo llevó a ser Concejal y luego tres veces Intendente de General Guido durante los períodos 1958-1962, 1963-1966 y 1973-1976, todos interrumpidos por los Golpes Cívico-Militares que se venían sucediendo en aquellos años convulsionados.

Durante sus tres gestiones, el pueblo de General Guido observó innumerables obras que mejoraron sustancialmente la calidad de vida de sus vecinos, destacándose la creación de la Sala de Primeros Auxilios de la localidad de Labardén, que se venía reclamando desde hace muchos años.

Es dable destacar que el Dr. Francisco Stea fue el primer intendente de la Provincia de Buenos Aires que se enroló en la línea de la UCR que apoyaba en ese entonces al Diputado Provincial, Dr. Raúl Ricardo Alfonsín, quien fuera más luego Presidente de la Nación Argentina (1983-1989), convirtiéndolo así en el primer alcalde netamente alfonsinista.

Abandonando más tarde su actividad en la política, se radica en Dolores para ejercer la profesión de médico, caracterizándose por su sencillez, cordialidad, solidaridad y buen trato con sus pacientes.

Innumerables anécdotas pueden atestiguar su vocación de servicio para con su gente y con sus pacientes, destacando como ejemplo las cuentas que poseía “Pancho” en las farmacias dolorenses para que sus pacientes de bajos recursos pudieran retirar medicamentos, soportando él todos los gastos.

Fines de semana, feriados y Navidades, “Pancho” siempre se hacía un lugar para, si era necesario, entrar campo adentro para saber cómo estaban sus pacientes.

Ya jubilado, y luego de soportar con estoicismo y entereza una larga enfermedad, el Dr. Francisco Stea fallece en Mar del Plata el día 23 de noviembre de 2006. Sus cenizas descansan en la entrada de su pueblo General Guido, donde se erigió un monumento a su memoria; imponiéndosele también en el año 2015, y a iniciativa del Poder Ejecutivo municipal de Guido, con su nombre una nueva calle que corre paralelamente a la nueva Terminal de Ómnibus del municipio vecino.

En Dolores, y por iniciativa del Concejal mandato cumplido Prof. Silvio Vitarella, el Honorable Concejo Deliberante de Dolores sancionó por unanimidad una ordenanza municipal en el año 2017, imponiéndole el nombre de Francisco Stea a la ex calle 313.

Estos y otros homenajes no son, nada más y nada menos, los que él se merecía por su larga trayectoria profesional y política. Pero, más importante aún, por su eterno compromiso y vocación de servicio para los más vulnerables.

Hoy, a 100 años de su nacimiento, el recuerdo y homenaje a quien en vida resultara ser un ejemplo de profesional y de militante político.

Dr. Francisco Stea (n.)

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